Recirculación de gases de escape

Seguridad

Las averías en el sistema de recirculación de los gases de escape (EGR) se indican mediante el encendido del testigo de control del motor y se manifiestan por sacudidas, ralentí irregular o falta de potencia. A menudo, el vehículo pasa al modo de emergencia, que el conductor puede reconocer por una reducción significativa de las prestaciones. De este modo se garantiza que no se produzcan daños en el motor.

Función

La recirculación de los gases de escape (EGR) es un método probado para reducir los contaminantes. Una cantidad definida de gases de escape se extrae del colector de escape y se mezcla de nuevo con el aire de admisión. Esto reduce el contenido de oxígeno en la mezcla de combustible y aire y, por tanto, disminuye la temperatura de combustión en los cilindros.

Dado que los nocivos óxidos de nitrógeno (NOx) se producen principalmente a altas temperaturas y presiones, la recirculación de los gases de escape puede reducir hasta en un 50% las concentraciones de NOx liberadas al medio ambiente. En los motores diésel, la recirculación de los gases de escape también reduce la formación de partículas de hollín en torno a un 10%.

Protección del medio ambiente

La recirculación de los gases de escape es uno de los métodos más importantes para reducir los contaminantes. Puede reducir hasta un 50% la concentración de óxidos de nitrógeno nocivos liberados al medio ambiente. En los motores diésel, la formación de partículas de hollín también se reduce en torno a un diez por ciento.

Conservación del valor

La recirculación de los gases de escape no requiere ningún cuidado especial. Si no se respetan los intervalos de cambio de aceite y mantenimiento, pueden producirse averías. El sistema de recirculación de gases de escape debe funcionar perfectamente para superar la prueba de emisiones.